Un estudio realizado por KK Women’s and Children’s Hospital encontró que muchos padres están comprando juguetes que no son apropiados para la edad de sus hijos. Por ejemplo, algunos padres creían que los juguetes que estaban comprando beneficiarían a sus hijos educativamente, y pensaron que su hijo tenía la edad suficiente para jugar con el juguete de manera segura.
Esto resultó en un aumento del 15% en las lesiones relacionadas con juguetes en niños menores de 5 años en 2021, en comparación con el mismo período en 2020.
Como consumidores, puede proteger a su hijo de los peligros que podrían ser causados por los juguetes, como asfixia, caídas, cortes y moretones, tomando decisiones de compra informadas y una supervisión adecuada del uso de un juguete después de comprarlo. Siga las buenas prácticas a continuación para proteger a su hijo:
“Buenas prácticas”
- Compruebe si el juguete está siendo retirado del mercado o prohibido. Lea los avisos o alertas sobre cualquier problema de seguridad o peligros potenciales.
- Solo compre de marcas y vendedores de buena reputación.
- Compre juguetes que sean adecuados para la edad de su hijo. Los juguetes para niños mayores deben mantenerse fuera del alcance de los más pequeños.
- Preste atención a la edad apropiada del juguete y busque etiquetas de edad como esta:
- Siga de cerca las recomendaciones de edad y otras instrucciones que vienen con el producto. No compre el producto si dicha información no está disponible.
- Revise los juguetes con frecuencia para detectar cualquier rotura que pueda resultar en bordes afilados o piezas pequeñas / sueltas que puedan causar asfixia. No permita que su hijo juegue con juguetes dañados.
- Asegúrese de que los juguetes con proyectiles no tengan bordes afilados. Verifique que el juguete no pueda lanzar proyectiles improvisados como lápices y otros artículos potencialmente peligrosos.
- Asegúrese de que los juguetes para montar sean estables y no se caigan fácilmente
- Retire las baterías de los juguetes electrónicos cuando no estén en uso. Las baterías que se dejan en los juguetes durante un largo período de tiempo pueden tener fugas de líquido venenoso.
- Compruebe que los compartimentos con pilas de botón estén bien asegurados, ya que la ingestión de dichas baterías puede provocar lesiones internas graves o incluso la muerte.
- Asegúrese de que los juguetes se guarden correctamente después del juego para evitar convertirse en un peligro de tropiezo.
- Supervise cuidadosamente a los niños pequeños cada vez que se utilicen juguetes con piezas pequeñas desmontables o imanes en su vecindad e inspeccione cuidadosamente las áreas de juego después del juego para asegurarse de que no queden partes o imanes donde puedan ser recogidos por un niño pequeño.
- Busque atención médica de inmediato si el niño traga cualquier parte del juguete o la batería.
No compre juguetes que:
- tiene cualquier parte que pueda caber en la boca, la nariz o el oído de un niño;
- tienen cable(s) expuesto(s);
- tener piezas que puedan calentarse y/o incendiarse;
- tienen material(es) tóxico(s);
- tener piezas pequeñas desmontables con imanes fuertes;
- tienen borde(s) afilado(s);
- tienen vidrio o pieza(s) que podrían romperse fácilmente;
- tener resortes, engranajes o partes con bisagras que puedan pellizcar o atrapar los dedos;
- tienen cuerdas o cordones largos que puedan representar un peligro de estrangulación;
- tener parte(s) que estén aseguradas con pasador(s) recto(s) o grapa(s);
- Producir un nivel de audio excesivamente alto que puede dañar la audición.
